¿Qué tan factible hubiera sido haber dado representación a las colonias americanas en el Parlamento británico, considerando las distancias involucradas?

Casi completamente inviable.

El viaje de América a Europa tomó cerca de tres meses. El Parlamento estuvo normalmente en sesión durante siete meses cada año, de noviembre a mayo. Tres más siete más tres son 13, pero solo hay 12 meses en un año.

Como tal, los parlamentarios estadounidenses tendrían que asistir al Parlamento por un breve período de tiempo cada año antes de volver a casa, en cuyo caso su presencia tendría poco efecto y se perderían la mayoría de los votos. Alternativamente, tendrían que vivir en Gran Bretaña de forma permanente una vez que fueran elegidos, sin volver a casa y sin reunirse con sus electores hasta que se disuelva el Parlamento y se convoque una nueva elección. En ese caso, ¿cómo podrían afirmar que representan los intereses de su circunscripción?

Considere también que si se convocara una elección en Gran Bretaña, la noticia tardaría tres meses en llegar a Estados Unidos, luego, por mucho tiempo que se llevara a cabo una votación, luego otros tres meses para que los ganadores crucen el Atlántico hacia Westminster. Habría pasado más de medio año antes de llegar allí, mientras que en Inglaterra los nuevos parlamentarios podrían haber estado en sesión durante los últimos seis meses.

Las colonias americanas ya estaban representadas. Al igual que las ciudades que no estaban en el parlamento estaban representadas o las mujeres que no podían votar estaban representadas.

La mentira estadounidense sobre impuestos y representación fue creada por los padres fundadores que se rebelaron y traicionaron a su propio país, se pusieron del lado del enemigo en una toma de poder para que pudieran convertirse en reyes con otro nombre. Los impuestos debían defender a los Estados Unidos contra los ataques franceses y españoles contra los colonos. Pagaron el mantenimiento de las flotas y las colonias y establecieron los costos. Las colonias tienen sus propios gobernantes. De hecho, la mayoría de los colonos querían permanecer como parte del imperio. Los rebeldes hicieron un gran trabajo de propaganda y mentiras y los británicos hicieron un mal trabajo al contener los ataques terroristas y controlar las armas que tenían.

¿Podrían haberles dado más autonomía? Probablemente pero no fue necesario. Fue solo una toma de poder por parte de algunas personas que no valoraban el honor o la integridad. ¡El resto, como ellos dicen, es historia!