Si los turcos hubieran invadido Europa con éxito, y se convirtiera y siguiera siendo principalmente musulmán, ¿cómo sería hoy?

Invadieron con éxito y, más concretamente, mantuvieron durante varios cientos de años una parte considerable del sudeste de Europa. Por eso hay tantos musulmanes allí. Son descendientes de invasores y descendientes de lugareños que se convirtieron al Islam.

El más lejano oeste al que llegó el Imperio Otomano fue el Asedio de Viena en 1683. El asedio fue rechazado, y nunca más llegaron tan lejos. En el transcurso de los siguientes cientos de años, su poder, territorio e influencia disminuyeron, hasta que en 1853, se los conocía como “El hombre enfermo de Europa”.

El problema para el resto de Europa era que expulsar al Hombre Enfermo por completo podría haber llevado fácilmente a la anarquía en los territorios europeos del Imperio Otomano y a un gran malestar en los territorios cercanos a ellos, pero pertenecientes a Rusia o al Imperio Austrohúngaro. La mayoría de las élites europeas no deseaban meter ese nido de avispones en particular, por lo que a los otomanos se les permitió quedarse en el rincón de Europa que habían tallado cientos de años antes.