En primer lugar, no es irrelevante, la historia rara vez lo es. En segundo lugar, la invasión nazi de Rusia ha cimentado en la mente rusa cuán vulnerables son en su frontera occidental. No existe una barrera natural que haga que los invasores lo piensen dos veces. Es por eso que Stalin se mostró inflexible acerca de tener a las naciones protectoras detrás de la Cortina de Hierro y por qué estamos tan equivocados al conducir a la OTAN a la puerta de la nación rusa. Su historia los pone increíblemente nerviosos, como debería ser.
Ambos países contribuyeron a la derrota de Hitler, pero la historia muestra que fueron los rusos quienes causaron el mayor daño a los alemanes en Moscú, San Petersburgo y lo más desastroso para los alemanes, su derrota en Stalingrado y la derrota masiva de tanques cuando se retiraron por el este y Europa central mientras el ejército ruso los mataba.