¿Adolf Hitler era un genio?
Para un montón de faltas amorales, los nazis en Nuremberg eran un grupo superior a la media. Cuatro de ellos, Schacht, Seyss-Inquart, Göring y Dönitz estaban en el rango de genios. De hecho, Schacht y Seyss-Inquart poseían un coeficiente intelectual igual al 1% de la humanidad. Desafortunadamente, el propio Hitler nunca fue probado (aunque algunos han intentado estimar su coeficiente intelectual), lo que generó mucha especulación sobre su inteligencia relativa.
Durante el testimonio de los acusados durante el juicio de los principales criminales de guerra, muchos de ellos ofrecieron sus reflexiones sobre Hitler; opiniones verdaderamente informadas que proporcionan una serie de pistas sobre la capacidad intelectual del Führer. (Nota: Uno debe, por supuesto, tener en cuenta que los acusados enfatizaron continuamente la autoridad inexpugnable de Hitler como un elemento en su defensa, diciendo en efecto que el Führer era todo el espectáculo y que tenían poca o ninguna influencia, mitigando así su propia culpa .) Los siguientes son algunos extractos pertinentes de este material fascinante:
Funk – IQ 124 : “Recibí inmediatamente la impresión de una personalidad excepcional … Comprendió todos los problemas con la velocidad del rayo y supo presentarlos de manera muy impresionante, con gran fluidez y gestos altamente expresivos”.
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Jodl – IQ 127 : “Hitler fue un líder en un grado excepcional. Su conocimiento y su intelecto, su retórica y su fuerza de voluntad triunfaron al final en cada conflicto espiritual sobre todos. Combinó en una medida inusual la lógica y la claridad de pensamiento, el escepticismo y el exceso de imaginación, que con mucha frecuencia previeron lo que sucedería, pero que a menudo se extraviaron. Realmente me maravillé de él cuando, en el invierno de 1941-2, por su fe y su energía estableció el vacilante Frente Oriental … La modestia su modo de vida era impresionante … … me convencí, al menos durante los años 1933 a 1938, de que no era un charlatán sino un hombre de personalidad gigantesca que, sin embargo, al final asumió un poder infernal. Pero en ese momento él definitivamente era una personalidad sobresaliente … Mi influencia en el Führer desafortunadamente no fue lo más grande posible, o tal vez debería haber sido en vista de la posición que tenía. La razón radicaba en la poderosa perso La realidad del déspota que nunca sufrió consejeros con gusto “.
Ribbentrop – IQ 129 : “Sus pensamientos y declaraciones siempre tuvieron algo definitivo y definitivo sobre ellos, y parecían provenir de su ser más íntimo. Tenía la impresión de que me enfrentaba a un hombre que sabía lo que quería y que tenía una voluntad inquebrantable”. y quien era una personalidad muy fuerte “.
Keital – IQ 129 : “En un grado que es casi incomprensible … Hitler había estudiado publicaciones del personal general, literatura militar, ensayos sobre tácticas, operaciones y estrategia y … tenía un conocimiento en los campos militares que solo se puede llamar increíble … Hitler era tan bien informado sobre armamento, liderazgo y equipo de todos los ejércitos y … todas las marinas del mundo que era imposible probar algún error de su parte … Hitler estudió por la noche todos los grandes libros del personal general de Moltke, Schieffen y Clausewitz … Por lo tanto Tuvimos la impresión: solo un genio puede hacer eso … incluso en las simples preguntas cotidianas sobre la organización y el equipo de la Wehrmacht … Yo era el alumno y no el maestro … … En lo que respecta … a las decisiones que no tuvo influencia “.
Dönitz – IQ 138 : “Una personalidad poderosa … con inteligencia y energía extraordinarias, con una educación verdaderamente universal, una fuerza que irradia la naturaleza y un enorme poder de sugerencia. Fui deliberadamente a su cuartel general solo raramente porque después de unos días me quedé en su cuartel general. Sentí que debía alejarme de su poder de sugestión … En principio, no se trataba de una consulta general con el Führer “.
Göring – IQ 138 : “Después de un cierto tiempo, cuando adquirí más información sobre la personalidad del Führer, le di la mano y le dije: ‘Uniré mi destino con el tuyo para bien o para mal … en los buenos y en los malos momentos, hasta la muerte. … Con la personalidad dinámica del Führer, los consejos no solicitados no estaban en orden y uno tenía que estar en muy buenos términos con él. Es decir, tenía que tener una gran influencia, como yo tuve … como lo tuve durante muchos años … Las sugerencias y consejos fueron descartados bruscamente cada vez que él había tomado una decisión o si … el posible asesor no tenía esa influencia o esa posición influyente … La política exterior, sobre todo, era el reino del Führer … La política exterior, por un lado, y el El liderazgo de las Fuerzas Armadas, por otro lado, alistó el mayor interés del Führer y fue su actividad principal … Se ocupó excepcionalmente con estos detalles … En ciertos casos, pediría que se le enviaran datos sin que los expertos supieran la razón exacta. en otros casos, explicaría a sus asesores qué pretendía hacer y obtendría de ellos los datos o su opinión. Las decisiones finales las tomó él mismo … En mi opinión, el Führer no conocía los detalles en el informe. campamentos de concentración, sobre atrocidades … Por lo que sé, no creo que haya sido informado “.
Schacht – IQ 143 : “Leyó una cantidad enorme y adquirió un amplio conocimiento. Jugó con ese conocimiento de una manera magistral en todos los debates, discusiones y discursos. Sin duda fue un hombre genio en ciertos aspectos. Tuvo ideas repentinas de que nadie más había pensado y que a veces fueron útiles para resolver grandes dificultades, a veces con una simplicidad asombrosa, a veces, sin embargo, con una brutalidad igualmente asombrosa. Era un psicólogo de masas de genio realmente diabólico … Creo que originalmente no estaba lleno de deseos malvados; originalmente, sin duda, creía que estaba apuntando al bien, pero gradualmente él mismo fue víctima del mismo hechizo que ejerció sobre las masas … Era un hombre de energía inquebrantable y de una fuerza de voluntad que venció todos los obstáculos … Solo esas dos características, la psicología de masas y su energía y fuerza de voluntad, explican que Hitler pudo reunir hasta el 40 por ciento, y más tarde casi el 50 por ciento, de la población alemana. le detrás de él “.
Algunos sostienen que Hitler no era un “pensador original”, negando así que su coeficiente intelectual fuera mucho más de 140. Soy de la opinión de que Hitler fue un pensador original. Esto se basa en las innovaciones obvias que Hitler creó en los campos de guerra blindada y propaganda, así como en su síntesis convincente para los alemanes de su tiempo de las principales ideas de su época (darwinismo social, nacionalismo, socialismo, capitalismo, etc.) en una ideología viable. Mi mejor suposición fue que el coeficiente intelectual de Hitler era de alrededor de 150.
Tenga en cuenta, sin embargo, que un alto coeficiente intelectual apenas equivale a la infalibilidad. Incluso Albert Einstein, considerado como el más brillante de los brillantes, hizo algunas erecciones de clase A. Hitler puede haber sido (posiblemente) un genio con respecto al coeficiente intelectual, pero el resultado final de sus políticas ocultó bien el hecho.
La personalidad triunfa sobre el coeficiente intelectual. Uno puede enumerar muchas mentes brillantes cargadas por déficits de personalidad (Bobby Fisher, Jimmy Carter, etc.) que finalmente les negaron alcanzar su máximo potencial. Los defectos de carácter como el exceso de confianza, el orgullo, la codicia, el juego y la venganza sin duda visitaron al Führer alemán. Cada uno de los muchos errores de Hitler tiene sus raíces en uno o más de estos rasgos que tienen poco que ver con el coeficiente intelectual.
De todos ellos, probablemente fue la arrogancia lo que hizo más para derribar a Hitler que cualquier otra cosa. Sucumbiendo a la mayor debilidad intrínseca del hombre hecho a sí mismo, Hitler comenzó a adorar a su creador mientras se enamoraba de su propia propaganda. Solo era humano. Cuando millones proclaman a uno como un salvador provisto por Providence, cuando uno acaba de producir una serie de asombrosos éxitos pronosticados por nadie, la naturaleza humana hace el resto.
Forrest Gump, sin duda un personaje ficticio, no tenía un coeficiente intelectual del que hablar, pero tenía muy pocos defectos de carácter.
Si Stupid es como Stupid, Genius es como Genius. Hitler, quien llevó a su nación a la ruina y la destrucción mientras asesinaba a millones, ciertamente no era un genio.
Fuentes : The IMT Transcripts, y Nuremberg: A Nation on Trial por Werner Maser, traducido por Richard Barry.