Paul von Hindenburg, presidente de Alemania, 1925-1934.
Su presidencia tenía mucho en común con la aeronave que lleva su nombre.
La forma más sencilla de describirlo era: amaba la democracia cuando se salía con la suya.
La constitución alemana era algo similar a la de los Estados Unidos: los proyectos de ley tenían que ser aprobados tanto por el Parlamento como por el Presidente. Pero a diferencia de los Estados Unidos, el presidente alemán podría disolver el parlamento en cualquier momento durante una ’emergencia’, según el Artículo 48 (Constitución de Weimar). Esto requeriría una nueva elección para repoblar el Parlamento.
- ¿Quién es el mayor emperador en la historia del mundo y por qué?
- ¿Quién es / fue el mejor político de todos los tiempos?
- ¿Por qué muchas antiguas colonias portuguesas se convirtieron en puntos de juego y turismo?
- ¿Cómo consiguió la República Popular Democrática de Corea (Corea del Norte) el tipo de gobierno que tiene?
- ¿Qué crees que sería lo más interesante de la historia?
Hindenburg siguió disolviendo el Parlamento como táctica legislativa cuando el Parlamento se encontraba en un punto muerto u opuesto a su agenda.
La primera vez fue en 1930, cuando hubo un estancamiento sobre una factura financiera.
Hindenburg disolvería el Parlamento tres veces más en 1932.
Esta maniobra permitió al Presidente gobernar por decreto hasta que se eligiera un nuevo Parlamento. Y aquí está la cosa: tanto los comunistas como los nazis harían una campaña vigorosa durante estas reelecciones. Los comunistas ganaron escaños y los nazis ganaron más. Los moderados se hicieron menos representados, ya que el Parlamento se volvió más cerrado entre comunistas y nazis.
Para 1932, los nazis eran el partido más grande en el Parlamento. Aunque Hindenburg despreciaba a Hitler, designó al Canciller de Hitler como una concesión a los nazis.
En 1933 se incendió el edificio del Parlamento (incendio del Reichstag). Hitler convenció a Hindenburg para que firmara la Ley de Habilitación de 1933, otorgando poder absoluto a Hitler para enfrentar la ‘crisis’. Hitler intimidó al Parlamento para que firmara el proyecto de ley. (‘Si vota en contra de esto y yo gano, iré tras de usted).
La democracia de Alemania colapsó en el abismo y derribó a Europa con ella.