¿Fue un error para los Estados Unidos * no * mencionar el futuro de la monarquía japonesa en la Declaración de Potsdam de 1945?

No lo creo. Los aliados incluso exigieron al emperador japonés que emitiera un documento llamado Declaración de la Humanidad (人間 宣言) que efectivamente invalidaba su reclamo de divinidad. Eso fue para alejarlo espiritualmente de su posición como el dios emperador del país y permitirle convertirse en un símbolo puro para el nuevo gobierno japonés, ya no su cabeza espiritual y legal.

PD: La Declaración, mientras negaba al emperador su divinidad, nunca contradijo su afirmación de ser como un dios. Específicamente, evitó la palabra “dios viviente” o “dios-hombre” (現 御 神, arikitsugami) y usó “encarnación de dios” (現 人 神, arihitogami). Entonces, incluso si el emperador no es un dios, aún podría ser una encarnación de dios, por lo tanto, aún humano pero no necesariamente menos divino.

Este es un matiz importante para los japoneses, así como en la cultura asiática que falta en la traducción occidental. Pero entonces, mientras el emperador renunciara a su divinidad, no creo que a los Aliados les importara si él afirmaba ser encarnación.