Yo diría que la gente puede hacer mucho al apoyar los esfuerzos de los gobiernos y las organizaciones para alentar la expansión de la UE y la expansión de la OTAN a largo plazo, lo que al principio contendría la agresión rusa y luego terminaría cualquier perspectiva de nuevas guerras frías o escalada.
- La primera fase debería consistir en militarizar a los nuevos miembros de la OTAN para que puedan repeler rápidamente cualquier incursión rusa. Esto incluye fuerzas de reacción rápida listas para ayudar a Ucrania y brindar apoyo a las naciones que bordean las fortalezas de Putin, como Finlandia, los países bálticos y Polonia. Idealmente, estas fuerzas deberían estar ubicadas lo más cerca posible de las áreas amenazadas, y la OTAN no debería retroceder al ruido de sable de Putin.
- Europa occidental y central deberían ser destetados de los combustibles fósiles rusos, los proyectos de energía y la dependencia de los recursos naturales lo antes posible. Los oligarcas y los políticos dictatoriales o corruptos deberían ser castigados económicamente en todo el mundo y con prohibiciones de viaje.
- Turquía, Ucrania, Finlandia y varias naciones balcánicas deberían ser admitidas en la UE rápidamente. Ucrania debería considerar ajustar temporalmente su frontera con Rusia para permitir esto, y si esto se logra con éxito, también debería unirse a la OTAN.
- Se debería alentar a Japón, Corea del Sur y Mongolia a consultar con la OTAN más a menudo sobre cuestiones de seguridad en Eurasia.
- China debe recordar constantemente la rivalidad regional y global con Rusia.
- La OTAN debería trabajar con Rusia para combatir el terrorismo y reducir los niveles de animosidad y miedo.
- La segunda fase consistiría en la reconstrucción de las antiguas repúblicas soviéticas leales a Putin y sus compinches política y económicamente, utilizando gradualmente campañas de información y acciones de inteligencia. Estas acciones se centrarían en promover la libertad, revelar hipocresías y abusos, y permitir a las poblaciones de la CEI y las naciones aliadas lograr la verdadera soberanía y autodeterminación. También sería necesaria una reeducación social para que las personas sean más tolerantes y acepten la democracia y los derechos humanos y civiles.
- La tercera fase sería invitar a las naciones de la CEI a unirse a la OTAN y la UE cuando hayan evolucionado lo suficiente como para ser compatibles con las otras naciones miembros. Esto puede llevar mucho tiempo, pero valdrá la pena.